No marcó tres goles el equipo de Jiménez esta vez, pero le ganó al Real Madrid gracias a los tantos de Keita y Luis Fabiano prácticamente consecutivos, alrededor del minuto 20 de partido. El Sevilla fue mejor que el Real Madrid, que terminó con diez por expulsión de Sergio Ramos. Podría haber logrado una goleada de serias dimensiones si hubiese tenido un mínimo acierto en el último pase durante los últimos instantes del encuentro. Pero lo importante es que los puntos se quedaron en Nervión y que el equipo vuelve a engancharse a la parte alta.
El Madrid salda sus últimos partidos en el Pizjuán con seis derrotas y un empate. Schuster concluye sus últimas cinco visitas con otros tantos fracasos y ningún gol. No es casualidad, ni mala racha, ni mala sombra. Es que el Sevilla ruge y luego ataca. Por eso ganó anoche. Porque el Sevilla ha vuelto y porque su estadio es una trampa. No es una deshonra perder contra un equipo así, ni debería afectar al ánimo. El Sevilla es de los pocos equipos del mundo que puede destrozarte sin que cometas errores. Cometió errores el Madrid, pero no los suficientes, no tantos como para castigarle así. "El Sevilla lo hace por ti. Y el Pizjuán lo hace por él".
El Real Madrid fue superado sin discusión, con dos puñetazos que le alcanzaron de pronto, sin haber hecho nada tan mal hasta entonces, sus centrales aparte. Es posible que el equipo que deslumbró ante el Valencia no sea tan bueno como se afanaba a airear por todas partes... O tal vez lo que pasa es que el Sevilla no te pega: te cuece en su estadio y después te devora. Ñam. Sigamos por este camino... ;)
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