
A pesar de los innumerables problemas y discuciones con los responsables de la discoteca días anteriores, se pudo celebrar una gran fiesta, donde acudieron más de un centenar de personas, entre los que destacaban universtitarios de variadas facultades de Sevilla, e, incluso, Andalucía.
La diversión y las ganas de pasárselo bien estuvieron presente en los jóvenes, entre los que me incluyo yo, hasta bien entrada la mañana. Y es que nuestra primera fiesta tuvo un gran éxito. A pesar de todo lo que hemos pasado y de lo estresados que hemos estado, entre llamadas de teléfono, ir a entregar entradas, ir a entregar el dinero... ¡un lío!, pero se ha salvado con éxito por parte del público asistente. Así pues, sólo hay que esperar a la siguiente fiesta... todo por una buena causa, que esperamos conseguir.
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